LOS DEMONIOS TIENEN UNA INFLUENCIA DIRECTA EN LA MENTE HUMANA

Del libro El Universo de los Espíritus, de Norberto Keppe

Los demonios quieren que los seres humanos culpen a sus sentidos de sus problemas para que ellos mismos puedan estar libres de cualquier sospecha (y, a propósito, como los demonios no tienen cuerpo físico, ellos desean permanecer escondidos en sus continuos intentos de fundirse directamente con la mente humana). Pero lo peor de todo es que la humanidad aceptó la inspiración demoniaca, y comenzó a atacar y despreciar el cuerpo, como si fuera una fuente de gran pecado.

Puedo afirmar es Dios y sus ángeles quienes actúan en la mente humana, o son los espíritus malignos quienes actúan. Originalmente, es la Energía Divina (Escalar) que sustenta todo, y los espíritus maliciosos son los que interfieren para desviarnos de nuestro verdadero camino. No saber de eso significa que nos volvemos títeres del mundo espiritual maligno.

Es extremadamente importante percibir el nivel de influencia directa que el ser humano recibe en su mente del mundo espiritual. Eso puede llevarlo al bien o al mal; el camino que él toma depende de su elección, Las personas religiosas llamaron siempre a ese fenómeno tentación por demonios, que tienen un fuerte deseo de destruir al hombre desde que él fue creado.

- Por qué Dios no perdona a Lucifer y sus seguidores?
- Pero usted cree que Dios no los perdona?
- Qué quiere usted decir con eso?
- Es Lucifer y sus seguidores quienes no quieren nada con el bien, porque se sienten quemados por la consciencia.

Es muy importante prestar atención a los espíritus malignos que Allan Kardec escribió en la página 38 de su libro: “Los espíritus malignos nos invitan para el mal”; es un placer para ellos vernos sucumbir y caer en su estado…Los espíritus malignos se manifiestan espontáneamente, o por medio de invocación”. Noten que Kardec tenía una perfecta comprensión del proceso de tentación, y especialmente sobre el placer que los malos espíritus sacan del mal que hacen, lo que aclara que lo mismo sucede con los seres humanos.

Una verdad fundamental que necesita ser revelada es que no hay ninguna persona viva en este mundo que no esté en contacto con espíritus – sean buenos, o especialmente malos, créalo ella o no, sea ella religiosa o más orientada hacia el mundo material. Esta es la condición humana en que nos encontramos.